El presidente argentino concretó el envío de una de sus promesas clave al Congreso, con el objetivo de lograr su aprobación antes de que finalice el año.

El presidente Javier Milei concretó un paso fundamental en su agenda de desregulación económica al firmar el proyecto de Ley de Reforma Laboral. La iniciativa, que había sido una promesa central de su campaña, fue enviada de inmediato para su tratamiento en la Cámara de Senadores este jueves, con el objetivo de lograr una aprobación legislativa en un lapso "extraordinariamente breve".

El proyecto llega al Congreso en medio de una fuerte tensión con los sindicatos, aunque el Gobierno ha dado señales de apertura. El Ejecutivo se ha mostrado dispuesto a escuchar modificaciones y buscar un consenso, particularmente en torno a la propuesta de la CGT sobre los contratos laborales para los menores de 30 años.

Entre las claves de la reforma se encuentran la creación de un fondo de cese laboral como alternativa a la indemnización, la posibilidad de pagar salarios en moneda extranjera y la flexibilización de las vacaciones. Otro punto polémico es la modificación de la ley de servicios esenciales, donde se busca restringir el derecho a huelga en áreas consideradas críticas para el funcionamiento del Estado.

La aprobación de este texto se considera una "prueba" crucial para la gestión de Milei. El oficialismo deberá intensificar las negociaciones con bloques opositores y aliados para sortear la dificultad que presenta la nueva composición del Congreso y lograr la sanción de la ley antes de fin de año.